lunes, 25 de mayo de 2009

El mundo gira y él nuevamente volvio a frenar

¿Cómo le explico a mi corazón?

Se sabe, mi corazón es bastante torpe, no entiende muchas veces la realidad, imagina, supone, y hasta se enamora y desenamora sin preguntarme.

Hay una cosa que es segura, las cosas que hace las hace con mucha intensidad, y yo sigo esa corriente de pensamiento.

Pero hoy no estoy para hablar de mí, estoy para hablar de él, el que muchas veces me impulsa a hacer muchas cosas, que da ánimo cuando más lo necesito y me lleva a hacer locuras por lo que siente él… Es, por lo menos, peculiar.

Yo no entiendo como a veces termino pensado en alguien que él me recomienda, no me cierra…
¿Por qué le doy tanta bola? No importa la razón ahora, lo más importante en este momento es que lo hago. A fin de cuentas, hoy mi corazón dice que quiere verla, no pide mucho más, pero quiere decirle lo que siente, lo que le pasa cuando escucha sus desventuras, sus alegrías, sus aburrimientos, y todo lo que le va pasando, cuando, por ejemplo, ve esos ojos hermosos.

El problema es el mismo que casi siempre, es torpe, como dije al principio, y se equivoca, obviamente, hay dos posibilidades en este error, la primera, es que ella no lo quiera escuchar, potable, pero la segunda es más razonable todavía… ¿Quién le va a creer a un corazón? Es simplemente un órgano, que en la mayoría de las personas tiene consenso con el cerebro y la boca a la hora de hablar, pero en mi caso no…

Él tiene el control, controla mi boca, a veces mi cerebro, dice mis sentimientos, pero no solo a hora de hablar, de expresar, si no también a la hora de besar, acariciar, demostrar, y demás cosas… Me despido, porque mi corazón necesita que lo entrene, para que sea menos torpe, pero me quiero quedar con dos cosas, la primera, es lo delirante que puede ser mi corazón al pensar que alguien podía llegar a creerle que es capaz de hacer que mucha gente cambie de parecer, hacer olvidar a otra gente, que lo empiecen a mirar, y la segunda, es una frase tuya, que me pidió mi corazón que transmita al papel, nosotros (mi corazón y yo), aunque no se si es para mi, también estamos locos por probarte.

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